Historia de Carl:

DuBois, Pennsylvania
Jubilado, antiguo jefe de bomberos, padre de cinco hijos y un abuelo muy orgulloso.
Detalles del procedimiento:
Edad durante el tratamiento: 71
Médico: Dr. Sandeep Bansal, director médico, Lung Center and Intensive Care Services, Penn Highlands, DuBois
Fecha del procedimiento: Febrero de 2019
La vida antes de las válvulas Zephyr®:
Antes de que me diagnosticaran la EPOC, tenĂa una vida plena. Criamos a cinco hijos. Fui mecánico en una empresa de vidrios, jefe de bomberos y entrenador de los equipos de sĂłftbol de mi hija durante muchos años. TambiĂ©n nos encantaba viajar en caravana y fue justo estando de acampada cuando notĂ© por primera vez los sĂntomas de la EPOC. Cuando estaba montando el campamento, comencĂ© a tener dificultad para respirar. Hace aproximadamente cinco años, acabĂ© en urgencias con problemas respiratorios y allĂ me sugirieron que debĂa consultar al Dr. Bansal del Lung Center de Penn Highlands Healthcare.
HabĂa dejado de fumar hacĂa ya unos siete años, por lo que el diagnĂłstico me pillĂł por sorpresa. Probamos todos los medicamentos posibles para tratarla, pero los sĂntomas no hacĂan más que empeorar. El mero hecho de intentar fregar el suelo me dejaba agotado para el resto del dĂa. LleguĂ© al punto de tener que hacer tres o cuatro inhalaciones de albuterol al dĂa y necesitaba oxĂgeno solo para llegar de la casa al coche.
Mi vida cambiĂł por completo. Esta enfermedad me limitĂł en muchos aspectos. Ya no podĂa ir de acampada simplemente por las hogueras; tampoco podĂa ir a un partido por la humedad, y eso me doliĂł, porque me encantaba ver a nuestro equipo de Penn State y a mi nieto jugar al fĂştbol. Me partiĂł el corazĂłn perderme sus partidos.
Hace dos años, me ingresaron en el hospital con neumonĂa bilateral y tuve un choque septicĂ©mico. Estuve en la UCI cinco dĂas. Un mes despuĂ©s, volvĂ a ingresar con neumonĂa. Fueron dĂas de mucho miedo.
Mi hija y mi yerno llevan juntos 10 años y en septiembre decidieron casarse en marzo de 2019. En mi siguiente visita al Dr. Bansal, le dije que mi hija iba a contraer matrimonio y tenĂa que ser capaz de llevarla hasta el altar y bailar con ella sin llevar oxĂgeno. Él sabĂa que estaba decidido a conseguirlo y me sugiriĂł que podĂamos probar con las válvulas Zephyr reciĂ©n aprobadas por la FDA.
La vida después de las válvulas Zephyr®:
Fui el primer paciente tratado en Penn Highlands Healthcare con las válvulas aprobadas por la FDA. Apenas han pasado unos meses, pero puedo afirmar con rotundidad que las válvulas Zephyr fueron una gran elecciĂłn. El procedimiento se desarrollĂł segĂşn lo previsto y, en cuestiĂłn de horas, ya me sentĂa estupendamente. Me quedĂ© en observaciĂłn unos dĂas, me sentĂa bien y mis maravillosas enfermeras me trataron como a un rey.
Tan solo cuatro semanas despuĂ©s de tener las válvulas Zephyr, pude llevar a mi hija hasta el altar sin oxĂgeno. Fue uno de los mejores momentos de mi vida. Pude incluso bailar con ella sin el oxĂgeno. Fue como si mis plegarias hubieran sido escuchadas.
La semana antes de la boda, cogĂ un catarro bastante fuerte, me tomĂ© un simple medicamento y me curĂ© sin problema. Antes de tener las válvulas, un resfriado me habrĂa tenido enfermo semanas. Ya no me da pánico respirar tampoco, como esos momentos en los que no podĂa respirar y acababa jadeando.
Es como si me hubieran regalado otra oportunidad de vivir. Cuidamos de nuestra nieta de 4 años varias veces a la semana, y ahora ya puedo seguirle el ritmo. Mi mujer tambiĂ©n me motiva mucho; hace que me levante y me mueva. Siempre lavo los platos y friego toda la casa, y se supone que tambiĂ©n deberĂa limpiar el polvo.
Siento que me han devuelto la libertad. ¡Ahora puedo seguirles el ritmo a mis nietos otra vez!